Ya sea con sus mejores amigos, con los niños o para un momento de contemplación durante el Adviento: ¿quién no lo ha experimentado? ¿El profundo deseo de sentirse especialmente a gusto en las ajetreadas semanas previas a la Navidad, de detenerse un momento y disfrutar de unas horas tranquilas llenas de ocio y creatividad? ¿Solo o en buena compañía? Con el taller de Navidad en marcha, puede conjurar todo tipo de alegría prenavideña en un abrir y cerrar de ojos. O mejor dicho, en una pincelada. Pruébalo: la brillante diversión artesanal para grandes y pequeños y conviértete tú mismo en un artista de las chucherías, creando recuerdos muy especiales.
Un juego de bricolaje navideño
La idea es tan sencilla como emocionante, el embalaje práctico y sin complicaciones, porque así es como viene: embalado de forma segura y resistente en un embalaje de cartón respetuoso con el medio ambiente, el taller móvil de Navidad se puede montar donde quieras, o donde el mantel de manualidades ya esté preparado. Cuando abres la tapa, el contenido está bellamente dispuesto: tres bolas de fabricación de alta calidad, de brillo mate, con un diámetro clásico de 8,0 cm en un color tradicional navideño. Dorado, rojo o blanco: la elección del color depende de usted. Un bote de pegamento, dos pinceles finos y tres colores de purpurina en polvo en dorado, rojo y plateado completan el set. Ya está listo ...
Y así es como funciona...
La primera bola a mano, el pincel mojado en el pegamento y listo: Para empezar, lo mejor son los dibujos grandes y sencillos, como estrellas, corazones o iniciales. Pero como con todo en la vida, la práctica hace al maestro: La práctica hace al maestro Para adornos especialmente complicados, recomendamos utilizar un pegamento fino que pueda aplicarse con precisión milimétrica (disponible en tiendas de manualidades especializadas), ya que el pegamento suministrado es relativamente duro.
Una vez pintado el motivo deseado en la bola, deja el pincel a un lado y ya puedes empezar a brillar. Basta con seleccionar el color deseado y espolvorear con cuidado una buena cantidad de polvo de purpurina sobre las zonas pintadas. Golpea suavemente la bola con un dedo para que caiga el exceso de purpurina. Repite el proceso -y con los colores adecuados- hasta que todas las zonas deseadas estén brillantes. Ya está listo: el adorno navideño único para ese brillo especial en el árbol.
Nuestros consejos:
La preparación lo es todo Además de una superficie de trabajo espaciosa, música navideña y un plato de galletas aromáticas, estos tres consejos también garantizarán una experiencia artesanal relajada y llena de ambiente:
Una chuchería es redonda y, por lo tanto, le gusta rodar. Si coges un vaso o un farolillo, tendrás una superficie estupenda sobre la que colocar la bola una y otra vez sin que ruede.
Al brillar: Coge una hoja de papel DIN A4 como base. Dobla la hoja por la mitad una vez y recoge el exceso de mica en ella. En cuanto haya terminado con un color, abra con cuidado el papel y golpee suavemente el polvo de purpurina hacia el centro. A continuación, deja que caiga lentamente en el tarro como por un conducto. Nota: Recomendamos utilizar una hoja distinta para cada color
Los adornos aplicados se secan especialmente bien si cuelgas la chuchería libremente, por ejemplo en la pantalla de una lámpara o en uno de nuestros prácticos soportes para chucherías.